Esta semana pasada falleció tristemente el jugador sevillista Jose Antonio Puerta a la edad de 22 años. Ha sido un tremendo impacto para el deporte español y aunque su pérdida todavía sigue dando coletazos a nivel informativo yo me pregunto que poder tiene actualmente sobre nuestra sociedad un deporte como el fútbol.

Anteriormente yo no había oído hablar de este jugador, aquí si preguntan de qué equipo eres seguramente sólo se esperan dos opciones, o eres del Barça o del Madrid, y además eso implica ser «Anti» del contrario, es decir, si eres del Barcelona eres antimerengue porque sino es que no eres realmente de ese equipo.

Otra de las preguntas que me hago es  que ¿si Puerta hubiera sido jugador de balonmano o de waterpolo el caso habría tenido el mismo impacto social?, ¿se hubiesen reunido más de 25000 personas para darle el último adiós?…yo creo que no, que el fútbol sigue siendo el punto en que la sociedad española encuentra su centro de entretenimiento frente a los problemas reales, es la clave de la distracción de un país enfermo en  el que nos hemos acostumbrado a ver cada día  cosas horrendas a nivel mundial y nos quedamos impasibles frente a un televisor que, como dice un amigo mío, no es más que un medio de creación de opinión.

Y la repercusión del fútbol queda clara también a ver que dos celebridades como Emma Penella o Francisco Umbral también fallecieron en la misma semana y pese a sus dilatadas carreras apenas tuvieron repercusión.

En cualquier caso, esto sólo representa para mí una crítica a la sociedad española y en ningún caso al seguimiento de un jugador que pasó de promesa a leyenda. Descanse en paz Jose Antonio Puerta.